Gala fin de curso 2023

Gala fin de curso 2023
Zamora y Toro misa y conciertos

lunes, 20 de enero de 2020

MICROBIOTA Y SALUD



Imagen extraida de: https://es.wikipedia.org/wiki/Bacteri%C3%B3fago  , 

De (Photograph courtesy of Vincent Fischetti and Raymond Schuch, The Rockefeller University.) - Powledge TM: New Antibiotics—Resistance Is Futile. PLoS Biol 2/2/2004: e53. doi:10.1371/journal.pbio.0020053, CC BY 2.5, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=1370810

La relación entre alimentación, bacterias intestinales y su influencia en la salud, es uno de los temas más candentes de la medicina actual. Se sabe que la falta de una población saludable de bacterias intestinales compromete nuestra salud, lo que a su vez está relacionado con una dieta poco sana y equilibrada. Pero sobre aún hay muchas lagunas sobre el impacto concreto que los alimentos tienen sobre el microbioma, en parte por la gran complejidad de la flora intestinal.

También el estilo de vida y la práctica regular de ejercicio físico impactan la microbiota.
El ejercicio físico moderado a vigoroso, aumenta la motilidad intestinal, modifica saludablemente la producción y liberación de la bilis, la producción de ácidos grasos de cadena corta, activación inmunoglobulinas, controla el peso y la masa muscular, disminuye inflamación y estrés oxidativo y mejora la sensibilidad a la insulina; todo ello se traduce en el aumento la diversidad de la microbiota.

Por ejemplo, científicos de la Universidad de Jaén han descubierto que tanto el aceite de oliva virgen extra como el ecológico son más eficaces para prevenir las infecciones provocadas por bacterias (como, por ejemplo, la E. coli o la Salmonella) que el aceite de pescado, una grasa presente en alimentos como el pescado azul y a la que se le atribuyen cualidades cardiosaludables. Los resultados mostraron que la tasa de supervivencia de los ratones a los que se había alimentado con una dieta rica en aceite de oliva virgen extra o ecológico era muy superior a la de los ratones alimentados con aceite de pescado. «Ahora nos queda probar la resistencia de los animales frente a otras bacterias y determinar por qué se produce esa supervivencia más alta y qué factores hay implicados».

"Uno de los asuntos que más trae de cabeza a los científicos son los llamados fagos, unos son virus que solo atacan a las bacterias y que se encuentran en el intestino. Cada fago solo ataca un tipo específico de bacteria, lo que significa que tienen la capacidad de influir notablemente en nuestro microbioma y, por lo tanto, en nuestra salud.
Los fagos necesitan bacterias para vivir, por lo que si las bacterias están ausentes, los fagos no sobreviven. Esto significa que cualquier alimento que influya en los fagos puede influir en las bacterias intestinales y viceversa. Por ejemplo, si aumenta la población de un tipo de fago, las bacterias que consumen disminuirán, lo que posiblemente provocará que se multipliquen otras especies de bacterias."

"La mayoría de los fagos en el intestino están presentes en forma latente: su ADN está integrado en el genoma de la bacteria. Son los llamados profagos. Los científicos han identificado ciertos compuestos que provocan que los profagos vuelvan a su forma activa. Cuando esto sucede, cientos de nuevos fagos brotan de la célula bacteriana, matando al huésped y atacando a otras bacterias. Estos compuestos incluyen la salsa de soja, la nicotina y algunos antibióticos, como la ciprofloxacina."

"Un nuevo estudio llevado a cabo en la Universidad de San Diego se ha propuesto aumentar esta lista y localizar los compuestos de los alimentos que inducen la actividad del fago. Los resultados han sido publicados en la revista Gut Microbes.Los expertos seleccionaron una gama de bacterias comunes en el intestino: Bacteroidetes y Firmicutes. A continuación, seleccionaron 28 compuestos de los alimentos y observaron el crecimiento de bacterias en presencia de cada compuesto específico. De todos ellos, 11 compuestos produjeron niveles de partículas de virus a una velocidad superior a la de los controles, lo que significa que influyeron en la actividad del fago."

"Algunos de los aumentos de fagos más importantes se produjeron en presencia de clavo, propóleos (un compuesto producido por las abejas), uva y el aspartamo, un compuesto que se utiliza como edulcorante. El inductor de profagos más potente fue la estevia, el sustituto del azúcar derivado de plantas. Con algunas especies de cepas bacterianas, la estevia aumentó el número de partículas de virus en más del 400%. "

"Por el contrario, algunos alimentos redujeron el número de partículas virales: ruibarbo, fernet (un tipo de licor italiano), café y orégano.  Otros compuestos que provocaron alteraciones diferentes en el intestino fueron la pasta de dientes, el extracto de semilla de pomelo y la granada.  También, uno de los alimentos antibacterianos más potentes que encontraron fue la salsa de tabasco picante."

Las bacterias del ácido láctico (LAB) son eliminadores de la oxidación e inhibidores efectivos de la inflamación. Las LAB probablemente tienen la capacidad de eliminar proteínas y péptidos AGEs/ALEs de los alimentos antes de su absorción; así, pueden eliminar gluten y carcinógenos de los alimentos.
Finalmente, la fibra de frutas y verduras también tiene efectos saludables. En línea con esto está la observación de que la misma combinación de LAB y de fibra actúan sinérgicamente.

Los yogures y leche ácida en general, tienen propiedades probióticas y fortalecen la flora intestinal y el sistema inmunitario por la presencia de diferentes cepas de Lactobacilo búlgaro (Lactobacillus bulgaricus), del estreptococo Termófilo (Streptococcus thermophilus), lactobacilo Casei (L.Casei); Bifidobacterias (bifidobacterium);  y del Lactobacilo Yoghurti; entre otros.

Cientos de especies diferentes de bacterias, pertenecientes a decenas de géneros diferentes de bacterias, han sido detectadas en cultivos de heces humanas. De ellas hasta la fecha los Lactobacillus y las Bifidobacterias se consideran como las más interesantes para utilizarlas como probióticos; por sus beneficios saludables (por ejemplo, las Bifidobacterias en lactantes) y porque un porcentaje importante de las consumidas en la dieta llegan de forma viable al intestino, para ejercer su acción beneficiosa. Las Bifidobacterias son menos resistentes al oxígeno y al tratamiento térmico.

Los probióticos son microorganismos que estimulan las funciones protectoras del tracto digestivo, también son conocidos como bioterapeuticos, bioprotectores o bioprofilácticos, se utilizan para prevenir las infecciones entéricas y gastrointestinales (Penna FJ. Et al., 1998). 

Para que un microorganismo pueda cumplir con esta función de protección tiene que poseer características tales como: Ser habitante normal del intestino, tener un tiempo corto de reproducción, ser capaz de producir compuestos antimicrobianos y ser estable durante el proceso de producción, comercialización y distribución para que pueda estar vivo en el intestino (Pardio Sedas VT y cols., 1994).

La protección de estos microorganismos se lleva a cabo mediante dos mecanismos: El antagonismo que impide la multiplicación de los patógenos y la producción de toxinas que impiden su acción patogénica. Este antagonismo está dado por la competencia por los nutrientes o los sitios de adhesión. Mediante la inmunomodulación protegen al huésped de las infecciones induciendo a un aumento de la producción Inmunoglobulinas, aumento de la activación de las células mononucleares y de los linfocitos. Las bacterias ácido lácticas pueden colonizar transitoriamente el intestino y sobrevivir durante el tránsito intestinal, además, por su adhesión al epitelio, modifican la respuesta inmune local del hospedador (Schiffin EJ et al.,1997).

Ha sido probado in vitro o in vivo el efecto de los probióticos en estados patológicos como diarreas, vaginitis, infecciones del tracto urinario, desórdenes inmunológicos, intolerancia a la lactosa, hipercolesterolemia y alergia alimentaria (Mombelli B, et al., 2000) (Farland LV. ,2000).

Para mejorar el aporte de nutrientes; a la leche ácida, se le pueden añadir frutas, frutillas del bosque (fresas, frambuesas, arándanos) que proporcionan flavonoides y vitaminas antioxidantes; así como frutos secos (nueces, avellanas) que proporcionan ácidos grasos poli-insaturados (AGP) y vitaminas antioxidantes; o bien se pueden añadir cereales que proporcional HdeC, lípidos, fibra, vitaminas y minerales; todos estos alimentos resultantes son recomendados para prevenir enfermedades cardiovasculares y para potenciar el sistema inmunológico. 
Además de ser saludable el alimento resultante, aumenta su aceptación por los jóvenes, al proporcionar diferentes sabores y texturas que son muy apreciadas por la población en general.

Para que ejerzan sus efectos beneficiosos para la salud estos probióticos se deben tomar regularmente en nuestra dieta (los efectos beneficiosos aparecen a las primeras semanas de su consumo y duran hasta algunas semanas después de dejar de consumirse).

Los científicos creen que estos hallazgos son importantes, porque el microbioma puede influir en nuestra salud física y mental, causando, por ejemplo, inflamación y un aumento del riesgo de cáncer. Por lo tanto, si los científicos pueden averiguar cómo alterar el microbioma de maneras específicas, se podrían eliminar o reducir estos riesgos.

Referencias:


viernes, 17 de enero de 2020

LA ACTIVIDAD FÍSICA VIGOROSA MODULA LA EXPRESIÓN DE LOS GENES FAVORABLEMENTE




Imagen sacada de : De Edoarado - Trabajo propio, basado en Arterial System en.svg, de LadyofHats, CC0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=18224208
La mejor forma de activar los genes beneficiosos que nos protegen de las enfermedades crónicas es a través de la práctica regular de buenos hábitos (actividad física, control del estrés y alimentación saludable).
Cada persona tiene una herencia genética, pero el fenotipo está determinado no solamente por los genes, sino por como éstos se expresen debido a la interacción con el medio (alimentación, ejercicio, contaminación, tabaquismo, estrés, etc.). La epigenética de dos gemelos puede llegar a ser muy diferente según pasan los años, debido a la influencia del medio, ya que su genética es idéntica.
La edad es sin embargo un factor de riesgo de enfermedades que no es evitable, pero el envejecimiento puede ser mucho más satisfactorio si se practican hábitos saludables.
Durante la práctica del ejercicio físico se activan centenares de genes que desencadenan los procesos catabólicos que permiten al músculo generar la energía para las contracciones y al finalizar el ejercicio, desencadenar los procesos anabólicos necesarios para la recuperación de depósitos de substratos (glucógeno) y la reparación de los posibles daños musculares; por medio del descanso y de la restauración.  Estos procesos pueden servir para prevenir y corregir desarreglos metabólicos de las personas (tales como obesidad, acumulo de grasas en tejido adiposo, acumulo de colesterol y arteriosclerosis, hipertensión arterial y diabetes tipo 2).
La actividad física se relaciona con cambios en la estructura del ADN sin modificar la secuencia de letras de los genes, de forma que impacta en cómo se expresa la información genética en cada tejido y célula humana, según demuestra un estudio liderado por investigadores del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM).
El estudio, publicado en Medicine and Science in Sports and Exercise, destaca que realizar actividad de forma moderada-vigorosa, caminar a diario de forma rápida o practicar algún deporte durante al menos 30 minutos, permite maximizar beneficios para la salud.
El nivel de metilación del ADN se ha relacionado con diferentes enfermedades como el cáncer, las cardiovasculares, la diabetes y la obesidad, entre otras.
"En los análisis hemos observado que las personas que más practican actividad física de intensidad moderado-vigorosa, presentan unos menores niveles de metilación en dos sitios del ADN", explica la investigadora Alba Fernández Sanlés, una de las autoras principales del estudio.
Alba Fernández Sanlés apunta que "uno de los genes que encontramos con cambios en sus marcas de metilación está relacionado con el metabolismo de los triglicéridos. Ya se conoce que la actividad física disminuye sus niveles, por lo que nuestros datos sugieren que la metilación de este sitio del ADN podría ser un mecanismo mediador del efecto de la actividad física sobre ellos".
El ejercicio actúa sobre uno de los elementos clave en el metabolismo de los triglicéridos que, en altas concentraciones, aumentan el riesgo de enfermedades cardiovasculares, y estos cambios del ADN influyen en cómo se leen nuestros genes y en su nivel de expresión.
El coordinador del grupo de investigación del IMIM y último firmante del trabajo, Roberto Elosua, resaltando "la importancia de promover un estilo de vida saludable que incorpore la práctica de actividad física para la prevención de las enfermedades cardiovasculares".
La metilación del ADN es un cambio químico en la molécula del ADN, sin alteración de la secuencia de letras, que determina el nivel de expresión de los genes, su capacidad para generar o no proteínas.
El nivel de metilación del ADN se ha relacionado con diferentes enfermedades como el cáncer, las cardiovasculares, la diabetes y la obesidad, entre otras.
De hecho, este tipo de actividad es la que se recomienda a la población general para fomentar un buen estado de salud y es de la que se obtiene un mayor beneficio, según el estudio.
Fernández Sanlés apunta que "uno de los genes que encontramos con cambios en sus marcas de metilación está relacionado con el metabolismo de los triglicéridos. Ya se conoce que la actividad física disminuye sus niveles, por lo que nuestros datos sugieren que la metilación de este sitio del ADN podría ser un mecanismo mediador del efecto de la actividad física sobre ellos".
Los investigadores han analizado datos de dos poblaciones occidentales, la catalana Regicor (Registre Gironí del COR) y la estadounidense Framinghan (Framingham Offspring Study).
En total, han podido trabajar con los datos de la actividad física de 2.544 personas de entre 35 y 74 años, a partir de cuestionarios validados por la comunidad científica internacional.
La metilación del ADN se estudió a partir de muestras de sangre de los voluntarios, y se analizaron más de 400.000 marcas repartidas por todo el ADN en cada una de estas personas.
"En estudios previos también observamos que el consumo de tabaco modifica los niveles de metilación del ADN", afirma Elosua, que resalta la importancia de promover un estilo de vida saludable que incorpore la práctica de actividad física para la prevención de las enfermedades cardiovasculares.


Referencias:
Fernández-Sanlés A, Sayols-Baixeras S, Castro de Moura M, Esteller M, Subirana I, Torres-Cuevas S, Pérez-Fernández S, Aslibekyan S, Marrugat J, Elosua R. Physical Activity and Genome-wide DNA Methylation: The REGICOR Study. Med Sci Sports Exerc;2019 [Epub ahead of print]


sábado, 2 de noviembre de 2019

UVAS Y FRUTAS DEL BOSQUE PARA MEJORAR LA MEMORIA



Numerosos estudios avalan los efectos beneficiosos del resveratrol presentes en las uvas y en cacao. El mecanismo es por que el resveratrol activa las Sirtuinas (SIRT 1- SIRT 7).
SIRT1 regula a la baja la actividad de p53, aumentando la esperanza de vida, la supervivencia celular y la neuroprotección; también desacetila el receptor gamma activado por el proliferador de peroxisomas y su coactivador 1 alfa, promoviendo la movilización de grasas, aumentando el tamaño y el número de mitocondrias y regulando positivamente la secreción de insulina.
Las sirtuinas vinculan la disponibilidad de nutrientes y el metabolismo energético. La restricción calórica, que aumenta la vida útil y es beneficiosa en los trastornos relacionados con la edad, activa la sirtuina. Por lo tanto, los principales esfuerzos se centran en el desarrollo de activadores de sirtuina.
Además, el resveratrol podría ayudar en el tratamiento o la prevención de la obesidad y en la prevención de la disminución de la función cardíaca y la pérdida neuronal relacionada con el envejecimiento, por lo tanto, preserva la memoria.
Como el resveratrol tiene una baja biodisponibilidad e interactúa con múltiples objetivos moleculares, el desarrollo de nuevas moléculas con mejor biodisponibilidad y dirigidas a la sirtuina en concentraciones más bajas es un campo prometedor de la química medicinal. Recientemente se han identificado nuevos activadores SIRT1 que son hasta 1000 veces más efectivos que el resveratrol. Estos mejoran la respuesta a la insulina y aumentan el número y la actividad de las mitocondrias en ratones obesos. Se están realizando ensayos en humanos con una formulación de resveratrol con biodisponibilidad mejorada y con un activador SIRT1 sintético.
También los polifenoles de las frutas del bosque (arándanos, frambuesas, moras etc.) previenen la perdida de memoria por el envejecimiento, y las enfermedades neurodegenerativas. Igualmente, el uso de compuestos antioxidantes de las frutillas del bosque, como la frambuesa (rica en ácido elágico) para combatir los calambres musculares, las micro lesiones y agujetas.
Investigadores del Instituto de Medicina del Deporte y del Trauma Atlético del Hospital Neoyorquino Lenox Hill, en colaboración con la Universidad de Cornell, han publicado recientemente los resultados de un estudio de evaluación de la eficacia del zumo de frambuesa (rico en ácido elágico) en la prevención de los traumatismos musculares y calambres de las personas que practican deporte. La ingesta de frutas del bosque como arándanos, frambuesas y moras, con un alto nivel de sustancias antioxidantes, puede retrasar los efectos del envejecimiento y la aparición de enfermedades degenerativas, como parkinson, alzheimer y artritis, según un estudio realizado por investigadores de las universidades de Granada y Murcia y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Incluso con un tratamiento corto (de varias semanas), la ingesta de antioxidantes hace que niveles de vitamina E plasmática aumenten. La actividad intelectual y física, así como el perder exceso de peso y alimentos antioxidantes protegen de enfermedades neuro-generativas (Mattson MP., 2000).
Investigaciones recientes muestran que los polifenoles de las uvas y los arándanos combinados pueden ayudar a prevenir disminución de la memoria entre algunos adultos mayores.
El estudio realizado por investigadores en Francia y Canadá se basó no solo en su propio trabajo en ratones, sino también en otros estudios preclínicos y clínicos que muestran que los arándanos y las uvas o sus extractos pueden ofrecer beneficios para el deterioro cognitivo relacionado con la edad. Su investigación animal anterior también mostró un efecto sinérgico: el extracto de uva mejoró la absorción de polifenoles en el extracto de arándano.
Para determinar si un extracto de ambas frutas puede afectar la cognición humana, los investigadores inscribieron a 215 hombres y mujeres de 60 a 70 años en un ensayo clínico de 6 meses. Aleatorizaron a los participantes para recibir un placebo o 600 mg por día de un extracto de uva y arándano rico en polifenoles que contenía 258 mg de flavonoides.
Al comienzo del ensayo, los investigadores administraron varias pruebas de capacidad cognitiva. El resultado primario fueron los resultados de las habilidades visuoespaciales y las pruebas de memoria episódica en las cuales los participantes observaron cajas, algunas que contenían patrones, abiertas en una computadora con pantalla táctil. Cuando los patrones aparecieron en el medio de la pantalla, los participantes tuvieron que combinarlos con la casilla correspondiente. Pruebas adicionales evaluaron la memoria verbal episódica y la memoria de trabajo.
Aunque todos los participantes mejoraron en la prueba de computadora con pantalla táctil después de 6 meses, los investigadores no informaron diferencias en el rendimiento entre los grupos de extracto y placebo. Pero cuando dividieron a los participantes en 4 grupos de acuerdo con el rendimiento de la prueba inicial, los investigadores encontraron una mejora significativa entre los receptores de extractos con el mayor deterioro cognitivo. En este grupo, la edad cognitiva estimada a partir de los resultados de las pruebas iniciales mejoró en casi 14 años en comparación con aproximadamente 5 años y medio en el grupo de placebo.
En general, el grupo de extracto también mejoró en el recuerdo verbal.
El otoño los trae uvas y frutos del bosque que hay que incluir en nuestra dieta
Referencias:
  1. Alcaín FJ, Villalba JM. Sirtuin activators.  Expert Opin Ther Pat. 2009 Apr;19(4):403-14. doi: 10.1517/13543770902762893.
  2. Mattson MP. Neuroprotective signaling and the aging brain: take away my food and let me run. Brain Res 2000; 886: 47–53.
  3. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/25533949
  4. Rebecca Voelker, MSJ How Certain Foods Affect Cognition, Seizures, and Cardiometabolic Disease Food for Thought JAMA. Published online October 24, 2019. doi:10.1001/jama.2019.16477


viernes, 25 de octubre de 2019

Afecta el consumo de alcohol a la composición corporal de quienes practican ejercicio de alta intensidad?



Cuanto más intensivo es el ejercicio menor tiempo se puede mantener debido al agotamiento muscular. Con el ejercicio de máxima intensidad se consiguen adaptaciones musculares que no se consiguen con el de intensidad moderada. Por ejemplo, para correr 100 metros no basta entrenar con intensidad moderada, sino que hay que entrenar con intensidad máxima. Evidentemente no se puede entrenar muchas horas a la intensidad máxima. Investigadores comprobaron que si se hace el ejercicio de forma interválica combinando periodos de intensidad máxima con recuperaciones cortas a intensidad moderada se obtenían las mismas adaptaciones musculares sin poner en riesgo la salud o la recuperación del deportista.
Este método interválico (IAT) busca conseguir la adaptación a la acumulación de ácido láctico en sangre. Lo que lo caracteriza es la "pausa incompleta", y que se consigue gracias a que la duración de los descansos es tal que no se alcanza una recuperación completa, total, de manera que la frecuencia cardiaca en las recuperaciones no desciende demasiado.
Este tipo de trabajo produce hipertrofia en el músculo cardíaco y un aumento del volumen de eyección sistólica, aumentando las posibilidades funcionales de los órganos implicados en los esfuerzos, fija movimientos más exigentes en coordinación, al ser estos más rápidos y más fuertes, y una adaptación psíquica a las situaciones de cansancio, a seguir entrenando aún en situaciones de fatiga. El entrenamiento interválico (IAT) produce mayores cambios en la capacidad de ejercicio que entrenamiento aeróbico tradicional. Intervalo de formación consiste en ejercicio de alta intensidad (15s a 4 min,> 90% VO2 máx.) seguido de un período de recuperación (40-50% VO2 máx.) de igual o mayor duración que el intervalo de trabajo asociado. Aunque el efecto neto es aeróbico, se activan las mitocondrias a mejoras en la capacidad de ejercicio, la biogénesis mitocondrial, los marcadores enzimáticos asociados al glicólisis, el metabolismo aeróbico y beta (beta)-oxidación.
Aunque tradicionalmente se considera como una modalidad de formación para los atletas, un informe reciente ha demostrado que el entrenamiento interválico es más eficaz que la formación tradicional ejercicio aeróbico en pacientes de hasta aproximadamente 75 de edad o con baja capacidad funcional (VO2 máx.< 13 ml / kg / min); por la tolerancia al ejercicio, los niveles de proteína activadora de la proliferación de peroxisomas, el activador de cooperación gamma-1alpha (PGC-1 alfa). La erosión en estos mismos marcadores está presente en poblaciones con prediabetes y T2D. La hipótesis principal es que el entrenamiento de intervalo proporcionará un estímulo más poderoso para mejorar la sensibilidad a la insulina que los entrenamientos tradicionales aeróbicos de intensidad moderada.
El IAT mejora la carga muscular de glucógeno y disminuye el ácido láctico después de ejercicio intenso.
El alcohol no es bueno para la salud y como contiene muchas calorías (7 Kcal. Por gramo) afecta a la composición corporal aumentando la grasa de los que abusan de él. Lo mejor es no beber alcohol, pero si se bebe debe de ser de forma moderada (menos de 2 vasos al día en hombres adultos, o un vaso al día para las mujeres). Ahora podemos elegir consumir vino o cerveza sin alcohol, lo cual es mucho mejor.
En un reciente estudio publicado en la revista Nutrients que tenía como
objetivo principal determinar los efectos de un programa IAT de 10 semanas (2 días / semana) en las mediciones antropométricas y de composición corporal, y evaluar si esos efectos están influenciados por el consumo moderado de cerveza (al menos 5 días). / semana), o su equivalente en alcohol.
Jóvenes (24 ± 6 años) adultos sanos (n = 72, 35 mujeres) se ofrecieron como voluntarios para un grupo sin entrenamiento (grupo sin entrenamiento) o para entrenamiento IAT.
Los que van a entrenar eligen si prefieren recibir alcohol o no. Aquellos que eligieron el alcohol fueron asignados aleatoriamente para recibir cerveza (5.4%; grupo T-Beer) o la cantidad equivalente de alcohol (vodka; grupo T-etanol) en agua con gas.
Aquellos que eligieron sin alcohol fueron asignados al azar para recibir cerveza sin alcohol (0.0%; grupo T-0.0Beer) o agua con gas (grupo T-Water).
De lunes a viernes, los hombres ingirieron 330 ml de la bebida con el almuerzo y 330 ml con la cena; las mujeres ingirieron 330 ml con la cena. Antes y después de la intervención, se midió la antropometría y la composición corporal, a través de un absorciómetro de rayos X de doble emisión. No se produjeron cambios en la masa corporal, circunferencia de la cintura, relación cintura / cadera, tejido adiposo visceral o densidad mineral ósea en ninguno de los grupos.
Es decir que los activos bebían alcohol, pero con el ejercicio quemaban más calorías que los sedentarios que no bebían alcohol. El balance energético era cero
Por el contrario, en todos los grupos de entrenamiento, se produjeron disminuciones significativas en la masa grasa junto con aumentos en la masa magra (todos p <0.05). Estos efectos positivos no fueron influenciados por la ingesta regular de cerveza o alcohol.
Como aconsejan los nutricionistas lo que cuenta no es un alimento (cerveza o vino) sino el conjunto de la dieta. La dieta mediterránea es saludable y su secreto está en los alimentos que la componen: verduras, frutas, cereales, frutos secos (almendras, nueces, avellanas, piñones), pescado y el aceite de oliva, y no abusar de la carne, el alcohol y los lácteos. El consumo de vino o cerveza, con moderación.
En conclusión, una ingesta moderada de cerveza no mitiga el efecto positivo del IAT de 10 semanas sobre la composición corporal en adultos jóvenes sanos. Pero el alcohol nunca antes ni durante el ejercicio, siempre después.

REFERENCIAS

2.      Church TS, Cheng YJ, Earnest CP, Barlow CE, Gibbons LW, et al. (2004) Exercise capacity and body composition as predictors of mortality among men with diabetes. Diabetes Care 27: 83–88.
3.      Molina-Hidalgo, C.; De-la-O, A.; Jurado-Fasoli, L.; Amaro-Gahete, F.J.; Castillo, M.J. Beer or Ethanol Effects on the Body Composition Response to High-Intensity Interval Training. The BEER-HIIT Study. Nutrients 201911, 909.

miércoles, 11 de septiembre de 2019

CON LA EDAD AUMENTA LA DIFICULTAD DE MANTENER EL PESO CORPORAL



Según vamos ganando años también solemos ganar peso y probablemente vamos aumentando nuestra presión arterial y la probabilidad de tener Diabetes tipo2. Para evitarlo debemos tener hábitos saludables, ejercicio y dieta sana.
Uno de cada seis jóvenes y uno de cada tres mayores en España son obesos, y los españoles gastamos una cantidad importante de dinero en productos milagro para bajar nuestro peso sin conseguirlo, pues para tener éxito debemos cambiar nuestros estilos de vida.
A lo largo de la evolución nuestros genes y nuestro metabolismo han estado modulados por la actividad física. La obesidad es el resultado de desequilibrios energéticos crónicos, que se materializan en la acumulación de grasas. El ejercicio librera catecolaminas que oxidan las grasas para obtener energía.
A las personas con obesidad o sobrepeso se les recomienda que cambien sus hábitos de vida, para que reduzcan su peso, pero esto si lo consiguen suele ser a largo plazo; entre tanto la práctica de ejercicio físico agradable y la alimentación saludable les ayudará a estar mas sanos. Existen estudios clínicos y epidemiológicos que así lo muestran; por lo que en esta revisión se profundiza en posibles explicaciones a nivel de los procesos de balance energético, inflamación crónica y estrés oxidativo.
En la obesidad los marcadores de inflamación y de estrés oxidativo está elevados, por el contrario, el ejercicio regular practicado voluntariamente potencia el sistema antioxidante y antinflamatorio a la vez que induce sensación de bienestar y permite un mejor control del peso corporal.
A todas las personas, pero más especialmente a jóvenes obesos, se recomienda la realización de ejercicio físico programado y planificado individualmente, de más de una hora todos los días de la semana. Todas estas medidas propuestas son complementarias y compatibles con los tratamientos farmacológicos. Se necesitan más investigaciones para identificar los factores clave sobre los que hay que intervenir para evitar los efectos deletéreos de la Obesidad.
El tejido adiposo es un órgano complejo que participa en los procesos metabólicos, regulación energética, control del hambre y saciedad a largo plazo y en muchas otras funciones. Sirve de almacén del exceso de energía y de vitaminas liposolubles de la ingesta, almacenando en forma de grasa el exceso ingerido. En periodos de déficit energético en la ingesta libera lípidos para mantener la energía, la temperatura corporal y las vitaminas necesaria para el funcionamiento del cuerpo. El almacén y la liberación de los lípidos de los adipocitos se realiza por medio de enzimas en los procesos anabólicos y catabólicos. La efectividad del funcionamiento de estas enzimas disminuye según envejecemos.
En una publicación se muestran los resultados de un estudio sueco que esclarece porque cuesta más perder grasa a medida que envejecemos:
“Muchas personas luchan por mantener su peso bajo control a medida que envejecen. Ahora, Una nueva investigación del Instituto Karolinska, en Suecia, ha descubierto por qué muchas personas tienen que luchar por mantener su peso bajo control a medida que envejecen: el recambio de lípidos en el tejido adiposo disminuye durante el envejecimiento y facilita el aumento de peso, incluso si no comemos más o hacemos menos ejercicio que antes” Referencia 1.
En otro estudio anterior también señala la influencia de la obesidad en el intercambio de lípidos entre el adipocito y los demás tejidos.
“La proporción de recambio de ácidos grasos libres disminuye significativamente con la expansión del tejido adiposo blanco. El tejido adiposo y los niveles de ácidos grasos saturados en la dieta se correlacionan significativamente con un aumento en el tamaño y número de células grasas.
La inhibición de la enzima triglicérido lipasa conduce a una acumulación de triglicéridos, mientras que la inhibición de la lipasa sensible a las hormonas conduce a la acumulación de diacilglicerol.
El gen 2 del interruptor G0 / G1 aumenta el contenido de lípidos en los adipocitos y promueve la hipertrofia de los adipocitos mediante la restricción del recambio de triglicéridos.
El exceso de triacilgliceroles (TAG), esteroles y ésteres de esteroles están rodeados por una superficie de monocapa de fosfolípidos y forman gotas de lípidos.
El número y el tamaño de la distribución de gotas de lípidos se correlaciona con la obesidad.
La muerte de los adipocitos asociada a la obesidad presenta una característica de muerte celular programada similar a la necrosis, en los adipocitos hipertróficos.
En realidad, la muerte de adipocitos puede ser un requisito previo para la transición de la obesidad hipertrófica a la hiperplásica.
El resultado es una remodelación del tejido adiposo en respuesta a la muerte o adipogénesis del adipocito, y la complejidad de las interacciones de las gotas de lípidos con los otros orgánulos celulares.” Ver ref. 2
En este nuevo tejido adiposo expandido el control de la saciedad esta dificultado porque la leptina generada por el exceso de grasa no genera sensación de saciedad en el cerebro. Y en este tejido adiposos de los obesos es más difícil la liberación de los lípidos para ser oxidados en la mitocondrias.
La hipertensión es, a menudo, una consecuencia de la obesidad. Junto a la diabetes y otras alteraciones (triglicéridos y colesterol alto, sobre todo) forma el llamado síndrome metabólico, el conjunto de dolencias asociadas con el exceso de peso. Pero si la relación se conocía, no se sabía a causa. Y el descubrimiento, que publica Cell (Referencia 3 y 4), no podía ser más mediático: es la leptina, también llamada hormona del apetito o de la saciedad, la que relaciona ambas patologías.
En el trabajo, realizado en ratones y personas por equipos de las universidades Monash (Australia) y Cambridge (Reino Unido), se compararon a personas que tenían problemas para sintetizar la leptina o con falta de receptores para esta hormona en el cerebro (es adonde se dirige para transmitir la sensación de saciedad) con otras que no tenían estas mutaciones. Y el resultado fue que, a falta de leptina (bien porque no se produce o bien porque no tiene donde actuar) la tensión era normal, y eso a pesar de que algunas eran personas muy obesas.
En el fondo, esto es tanto como decir que la grasa produce la hipertensión, ya que la leptina es una hormona que se genera a partir de esta. Por eso es más abundante cuando más se come y más lleno está el individuo. Entonces llega al cerebro y le da el mensaje de que no hay que ingerir más, porque se ha llegado a un nivel de saciedad (por eso muchos intentos de sistemas para adelgazar pasan por producir esta misma señal sin necesidad de que haya comida de por medio).
Sadaf Farooqi, uno de los autores del trabajo, ha dicho: “Sabemos que la leptina regula tanto nuestro peso como nuestra tensión arterial a través de su acción en el cerebro. Dirigirse a esa actividad puede ofrecer una forma útil de ayudar a las personas a luchar contra la obesidad y sus problemas asociados, como la hipertensión y la enfermedad cardiovascular”.
Los investigadores ahora están estudiando vías farmacológicas para bloquear la leptina como una manera de luchar, entre otras dolencias, contra la hipertensión. No es un esfuerzo vano: se espera que el mercado de los antihipertensivos en el mundo supere los 32.000 millones de euros en 2018. La Encuesta Nacional de Salud española arroja que hay 7,2 millones de mayores de 15 años hipertensos.
Referencias
2.     Engin A. Fat Cell and Fatty Acid Turnover in Obesity. Adv Exp Med Biol. 2017;960:135-160. doi: 10.1007/978-3-319-48382-5_6.



jueves, 22 de agosto de 2019

BASES BIOQUÍMICAS DE LA ANSIEDAD TEMPRANA Y LA DEPRESIÓN




Imagen: Color rojo significa mayor activación del área con la emoción Existe universalidad cultural de las sensaciones corporales asociadas con 13 emociones en una gran muestra internacional (3,950 personas) Extraída de  Proc Natl Acad Sci U S A. 2014 Jan 14; 111(2): 646–651.

En general, las emociones condicionan nuestro estado mental y corporal para ayudarnos a afrontar los desafíos detectados en nuestro entorno. Por esa razón, las sensaciones que emergen de ciertos cambios corporales son una característica importante de nuestras experiencias emocionales.
"Las emociones ajustan no sólo nuestra salud mental, sino también nuestros estados corporales. De esta manera, nos ayudan a prepararnos para que podamos reaccionar rápidamente ante los peligros, pero también para que aprovechemos las oportunidades que nos ofrece nuestro entorno, como cualquier interacción social placentera", explica Lauri Nummenmaa, uno de los autores del estudio .
La conexión entre emociones y cuerpo hace posible, por ejemplo, que experimentemos la ansiedad como dolor en el pecho o que el enamoramiento desencadene cálidas sensaciones placenteras en todo nuestro organismo.
También constataron que los mapas o patrones corporales de la emoción son los mismos en diversas culturas de Europa Occidental y del este asiático, lo que sugiere que las emociones y los patrones de sensaciones corporales que les corresponden tienen una base biológica
Por otro lado, un segundo experimento demostró la importancia de la amígdala cerebral -que responde a estímulos sentidos por otras partes del organismo- en el procesamiento de información emocional procedente de otros individuos”.

Un grupo de investigadores de la Universidad de California Davis, en colaboración con la Universidad de Wisconsin-Madison (Estados Unidos), ha descubierto que la neurotrofina-3 estimula el crecimiento de las neuronas y sus conexiones, lo que supone que un aumento de esta molécula en el cerebro podría ayudar al tratamiento de la ansiedad debilitante y los trastornos depresivos.
“Los trastornos de ansiedad a menudo surgen durante la adolescencia y pueden seguir afectando a las personas durante la mayor parte de sus vidas”, según comento el investigador Andrew Fox.
“Se utilizó un virus alterado para aumentar los niveles de neurotrofina-3 en la amígdala dorsal de los monos. Así, pudieron observar que su incremento produce una disminución en los comportamientos relacionados con la ansiedad, ya que cambió la actividad en todas las regiones cerebrales distribuidas que contribuyen al desarrollo de estos trastornos”.
En otro estudio también se incide en que “el temperamento ansioso es una disposición temprana en la vida que aumenta notablemente el riesgo de desarrollar psicopatología relacionada con el estrés, como la ansiedad y los trastornos depresivos. Dado que la ansiedad y la depresión son comunes, y con frecuencia tienen su inicio temprano en la vida, una mejor comprensión de los factores relacionados con su inicio en la infancia facilitará el desarrollo de nuevas intervenciones informadas neurológicamente más eficaces”.
“Los estudios de neuroimagen multimodal revelan un metabolismo cerebral alterado en las regiones prefrontal, límbica (por ejemplo, el núcleo central de la amígdala (Ce) y el hipocampo anterior).
Los estudios de heredabilidad demuestran que la variación individual en Ansiedad temprana es heredable, y los análisis genéticos correlacionales demuestran que el metabolismo en la corteza frontal orbitaria posterior, el núcleo del lecho de la estría terminal y el gris periacueductal comparten un sustrato genético con ansiedad temprana..
A nivel molecular, el hallazgo de una expresión reducida de los genes de neuro plasticidad de la amígdala central estaría asociada a la ansiedad temprana.
Los métodos de vectores virales para alterar la expresión génica en el Ce de los NHP jóvenes se están utilizando actualmente como un preludio para conceptualizar nuevas intervenciones de vida temprana focalizadas molecularmente.
Un temperamento ansioso temprano en la vida es un factor de riesgo para el desarrollo de ansiedad, depresión y abuso de drogas.
Referencias:
Volynets S, Glerean E, Hietanen JK, Hari R, Nummenmaa L. Bodily maps of emotions are culturally universal. Emotion. 2019 Jul 1. doi: 10.1037/emo0000624.
Fox AS, Kalin NH el al. Dorsal Amygdala Neurotrophin-3 Decreases Anxious Temperament in Primates. Biol Psychiatry. 2019 Jul 2. pii: S0006-3223(19)31487-8. doi: 10.1016/j.biopsych.2019.06.022.
David M. Howard, Mark J. Adams, Andrew M. McIntosh et al.  Genome-wide meta-analysis of depression identifies 102 independent variants and highlights the importance of the prefrontal brain regions Nature Neuroscience volume  22, pages 343–352 (2019
Clarke TK, McIntosh AM et al. Genetic and environmental determinants of stressful life events and their overlap with depression and neuroticism.
Version 2. Wellcome Open Res. 2019 Jan 14 [revised 2019 Jan 1];3:11.

martes, 20 de agosto de 2019

CUANDO EL DOLOR FÍSICO VA ACOMPAÑADO DE LA PENA



El dolor es inherente a la vida de los animales y del hombre.
Debido al dolor, podemos recibir advertencias que activan los reflejos para escapar del peligro potencial.
El dolor lo puede provocar múltiples causas: el mal funcionamiento de un órgano por falta de sangre o de oxígeno, un traumatismo, un cáncer, una inflamación, una intoxicación, etc.
En el caso de los deportistas además puede ser producido por una sobrecarga, un mal entrenamiento, etc. Raro es el deportista que esté mucho tiempo sin haber sentido dolor por lesiones o sobrecargas.
José A. Martín Urrialde, profesor titular de Fisioterapia de la Universidad CEU San Pablo, de Madrid, añade, además, otros cuadros lesivos como la deshidratación "debidos fundamentalmente a alteraciones fisiológicas durante el esfuerzo, así como episodios de lumbalgia".”
Y el comunicado citado en la referencia continúa: “La aparición de las lesiones en los corredores son multifactoriales. No existe una sola causa para que se produzcan pero sí hay factores de riesgo que influyen. "Una alterada biomecánica del miembro inferior, practicar running en superficies rígidas, tener una inadecuada condición muscular y una mala progresión en el entrenamiento" son factores que influyen en la aparición de lesiones, según indica Gómez. Además, el incorrecto uso de material "como estrenar calzado o vestuario el mismo día de la competición y no valorar adecuadamente la intensidad de la prueba a la que se presenta el corredor", también influyen.”
Normalmente las lesiones se acaban curando, pero necesitan una adecuada rehabilitación.
Al final de nuestras vidas sobre todo si tenemos enfermedades raro es evitar el dolor. Aquí nos vamos a referir a los aspectos psicológicos del dolor crónico, sugún describe en un articulo el Dr. Salim Zerriny.
“Cuando el dolor que dura más de seis meses se considera crónico y es posible que no desaparezca. Con dolor crónico, se activa el sistema nervioso y aumenta su reactividad a los estimulaos entrantes. Esto puede ser bastante angustiosos y provocar ansiedad y a largo plazo depresión.
El dolor, la depresión y la ansiedad viajan a través de vías similares a lo largo del sistema nervioso y comparten muchos de las mismas señalizaciones biológicas. Una de las áreas del cerebro que recibe señales de dolor, la región límbica, comparte muchos de los mismos neurotransmisores que las señales de estado de ánimo. Sabemos por estudios de investigación que utilizan neuroimagen que las partes del cerebro que controlan las emociones y las características sensoriales del dolor están alteradas en personas con dolor crónico.
La conexión entre el dolor y la emoción también se puede ver con ciertas clases de medicamentos. Por ejemplo, algunos medicamentos utilizados para tratar el dolor pueden causar efectos secundarios como la euforia, y los medicamentos desarrollados originalmente para afecciones psiquiátricas pueden ser tratamientos efectivos para ciertos tipos de dolor.
Esta asociación se observa en afecciones como la fibromialgia y el síndrome del intestino irritable, donde las estrategias de tratamiento conductual y psicológico han demostrado beneficios en la reducción de los síntomas.
Los riesgos que puede tener el dolor o pena no correctamente tratados son:
• Magnificar los efectos negativos del dolor. Los pensamientos y creencias negativos sobre el dolor a menudo conducen a un peor funcionamiento emocional y social y una disminución de la respuesta a las intervenciones médicas para el dolor.
Miedo al dolor que genera comportamientos de evitación o protección. La anticipación de una mayor sensación de dolor puede ser limitante para realizar actividad física o sociales.
Las estrategias para tratar el dolor deben incluir:
Aceptación del dolor: esta es una técnica desafiante pero altamente efectiva enfocada en desarrollar una actitud de aceptación hacia el dolor. Implica hacer todo lo posible para reconocer sin prejuicios la presencia de dolor y minimizar los pensamientos y comportamientos inútiles que no mejorarán el dolor.
• En casos de traumas hay que entender la relación entre el trauma previo y el dolor crónico. Las terapias psicológicas pueden abordar las respuestas de estrés físico y emocional en curso vinculadas a experiencias traumáticas.
Existen múltiples opciones de tratamiento psicoterapéutico comúnmente utilizadas para ayudar a las personas a controlar el dolor crónico. Se ha demostrado que practicar la meditación y volverse lo más activo posible son métodos efectivos que se pueden hacer por su cuenta.
Terapia cognitivo conductual (TCC): terapia de conversación que ayuda a cambiar sus pensamientos y comportamientos relacionados con el dolor y mejorar las estrategias de afrontamiento. Puede también proporcionar una red de apoyo.
Reducción del estrés basada en la atención plena (MBSR): una forma de mediación en la que aprende a tomar conciencia de sus pensamientos y sentimientos sin prejuicios y acepta el dolor y otras sensaciones incómodas como positivas o negativas.
Hipnosis para el dolor (hipnoanalgesia): un conjunto de técnicas destinadas a modificar sus pensamientos, sentimientos y comportamientos a través de sugerencias subconscientes destinadas a alterar su experiencia de dolor.
Biorretroalimentación: una técnica en la que se controlan las funciones de su cuerpo, como la frecuencia cardíaca, la tensión muscular y la temperatura de la piel, la respiración, para informarle sobre sus respuestas involuntarias al estrés. Durante las sesiones de biorretroalimentación, aprende una variedad de formas de controlar sus reacciones físicas al estrés y la ansiedad.
Lo que se ha demostrado que marca la diferencia en las personas que manejan el dolor crónico es probar una variedad de enfoques, como técnicas cognitivas y conductuales, mantenerse activo, practicar meditación y trabajar con su médico para encontrar intervenciones médicas y de procedimiento efectivas. Cuantas más de estas intervenciones intente, más probabilidades tendrá de encontrar algo que tenga un impacto positivo.
Los desafíos de hacer frente a una condición de dolor crónico no pueden ser subestimados. Las emociones negativas que surgen pueden perpetuarse, ya que los sentimientos de dolor pueden conducir a la depresión, y esa misma depresión puede empeorar el dolor.
Nuestra comprensión del dolor continúa evolucionando, y con ella pueden venir mejores tratamientos personalizados y una mejor comprensión de la influencia del dolor crónico en el cuerpo y la mente.”
Referencias:
Salim Zerriny, MD On August 14, 2019 @ 10:30 am In Back Pain,Mind body medicine,Pain Management